POSADO NO ROBADO DE SHUN

Verano. Las temperaturas suben y la gente se refugia en las playas, lugar donde enseñar al resto del mundo los cuerpos esculturales que la dieta y el gimnasio han esculpido a base de sacrificio durante los otros nueve meses del año. Algunos juegan con las olas del mar y otros se broncean en la arena. Algunos acuden a la playa con la casa a cuesta: sombrilla, tuppers, radio, televisión, mesa y sillas plegables, una piscinita para los niños pequeños... -cosa que se acentúa con la crisis que parece que sufrimos actualmente- y otros con lo estrictamente necesario para pasar una jornada refrescante.

El caso es que en las playas se producía hasta hace muy poco una estampa que poco a poco se está perdiendo y que era algo muy típico del verano español: los posados de verano, que si se encarnaran en una sola persona, sería en Ana Obregón. ¿Dónde están esos posados de Ana, quien creyéndose una quinceañera jugaba y se revolcaba con el mar, a la orilla de la playa, mientras los medios la flasheaban y la grababan para poder mostrárselo a un público hambriento que por desgracia no podía gozar del espectáculo en vivo y en directo? ¿Por qué la Obregón ya no nos deleita en las playas españolas con sus bikinis y sus carnes morenas?

Del mismo modo, también se rumoreaba en alguno de esos programas que tanto bien hacen a la cultura del país y que tanto abundan en la parrilla televisiva española, que la casa real tampoco nos deleitará este año con su posado. ¿Será cierto? ¿Nos quedaremos sin ver cómo los príncipes, princesas y sus retoños disfrutan del verano que nosotros les pagamos con nuestros impuestos? ¿Nos quedaremos sin ver a Letizia, nombrada hace poco una de las mujeres mejor vestida del universo? Al menos que nos deleiten con uno de sus montajes photoshoperos.

Pero... Aún existe alguien tan ávido de fama y reconocimiento -de la escuela de la Obregón- que no se ha olvidado de nuestras costumbres estivales y sí que ha hecho su posado. Shun no se ha querido olvidar de sus fans y de esta guisa -bañador rosado, camisa que insinúa y melena verde al viento- ha posado para nuestras cámaras. Todo sea por no olvidar las costumbres.