ALMAS GEMELAS

INTERIOR. DIA. PANADERIA DE IKKI.
Tras varios intentos de declararle su amor a Ikki, Shun por fin se envalentonó y dio el paso.

IKKI: Hola Shun, ¿vienes a por tu ración diaria de pasteles de chocolate? Ya te los tengo preparados.

SHUN: No, vengo a decirte que te quiero.

IKKI: ¡¿Qué?!

SHUN: Que te quiero, I love you, ich liebe dich, je t´aime, s´apayo, orsu illo te comía todo lo de abajo…

IKKI –nervioso-: Lo siento Shun pero…

SHUN: No sigas, te van más las rubias con dos buenas tetas…

IKKI: No, no es eso… ¿Tú te has visto? Sería incapaz de salir con alguien con un físico como el tuyo… No te lo tomes a mal…

SHUN: ¿Tomármelo a mal? Si por algo me caracterizo es por ser más superficial que quienes fichan a las modelos del harén de Berlusconi. Con esto me he enamorado aún más de ti y me demuestra que estamos hechos el uno para el otro. Dame unos días para que recupere mi figura y te conquistaré.

Al terminar la frase Shun se dirigió a la puerta con una sonrisa en la boca. Pero antes de salir de la panadería se giró hacia Ikki para despedirse.

SHUN: Se me olvidaba. Olvídate de volver a hacer caja a costa de mis pasteles.

Y así, momentos después de que el peliverde hijo de los Rufianes se marchase, Ikki continuaría aún impactado por la situación que acababa de vivir.

P.d. Si algún blogger con conocimientos de informática sabe como se puede volver a poner música con el nuevo deezer en el blog que se lo explique a los Rufianes, please, que en esta materia andan cortísimos¡¡¡¡